¿Cómo se relacionan el trabajo y la salud?
Aunque puedan parecer dos temas completamente diferentes, el trabajo forma parte de una de las más esenciales partes de la salud tanto mental, como física y social. En el ámbito mental, la psicología no escatima cuando se habla de un buen entorno laborable, donde pueda sentirse apreciado y beneficiado por su labor, sentirse congruente con la sensación de bienestar (que siempre será relativa a la persona) y sobretodo útil y pleno en sus ejercicios diarios. Por otro lado, en el área física, se vuelve cada vez más común escuchar de estos (ya que suelen ser los más notorios), desde una caída hasta la muerte, son formas físicas que tienen demostracioens (en la mayoría de los casos) de que un trabajo terminó para mal; afectando temporal o permanentemente a una persona. Finalmente, en el ámbito social, algunos trabajos afectan las rutinas de sueños de las personas, lo que lastima su red social; afectan su status e incluso llegan a perjudicar su forma de relacionarse con otros mermando sus tiempos de ocio.
Aunque existen otras bastantes formas en las que la salud se relaciona con el trabajo, estas son de las más comunes, y por lo tanto suelen ser las más perjudiciales. Existen -a grandes rasgos- dos formas en que las personas pueden verse afectadas en cualquiera de estas áreas: 1) por presencia o ausencia de acciones de la empresa, donde las afectaciones recaen directamente sobre lo que se hizo o dejó de hacerse en las labores empresariales y 2) por presencia o ausencia de acciones del empleado, quien deliberedamente puede, por ejemplo, no utilizar el equipo de protección necesario.
Sobra decir que, estos temas no son un juego y es crucial resolverlas desde la raíz, administrando correctamente la capacitación de los empleados y ejecutando diagnósticos constantes sobre la seguridad bio-psico-social de las persona. ¡Todo esto para garantizar una empresa que funcione de manera óptima!